Todas las estaciones de servicio deben contar con una caja fuerte construida con material de grado 4. Debe tener un detector sísmico, dispositivo de bloqueo y sistema de apertura retardada.
2. Custodia de llaves:
Las llaves de la caja fuerte deben ser custodiadas por el encargado del negocio o un empleado y el propietario o persona responsable de recoger los fondos. No pueden estar en manos de la misma persona o personas que trabajen juntas.
3. Límites de efectivo:
Debe mantenerse una cantidad máxima de dinero en efectivo en posesión de los empleados en la caja registradora. Esta cantidad máxima debe asegurar el flujo constante de dinero y el resto debe estar en una caja fuerte.
4. Despacho de combustible por cantidades determinadas de dinero:
Se permite despachar combustible por cantidades exactas de dinero, sin necesidad de dar cambio. Los clientes deben ser informados de esta opción mediante carteles visibles.
5. Evaluación de riesgos:
Se debe hacer un estudio de riesgos para poder estar preparado ante esas posibles situaciones.
6. Capacitación en seguridad:
Es importante tener personal capacitado para que se respete los puntos establecidos y disminuir la posibilidad de que ocurra un accidente.
Estas medidas garantizan la seguridad y protección en las gasolineras, evitando riesgos que pongan en peligro la salud de los colaboradores, clientes y el correcto funcionamiento de la estación. Sin embargo, es importante recordar que la seguridad en las estaciones de gasolina no se limita solo a estas medidas. Como mencionamos, también se deben realizar evaluaciones de riesgos periódicas y mantener una cultura de seguridad en toda la organización.
¿Cómo usarías estos consejos adaptándose para aplicarlos en distintos negocios?
