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¿Qué pasa en tu cuerpo cuando dejas de fumar?

Fumar es la causa de 3.5 millones de muertes en todo el mundo, debido a causar enfermedades como el cáncer de pulmón, los accidentes cardiovasculares, EPOC o enfisemas pulmonares, entre otras. Muchos sabemos que fumar no es lo ideal para mantener un estilo de vida saludable y prevenir enfermedades. Sin embargo, nunca es tarde para abandonar el consumo del tabaco. Cuanto más temprano deje de fumar, menores serán las probabilidades de llegar a tener cáncer y otras enfermedades. Una gran motivación es saber que desde el momento en el que tomas la decisión de abandonar el consumo del tabaco, tu salud empieza a mejorar y, con el tiempo, reducirás el riesgo de enfermedades relacionadas con el tabaquismo. Por eso, te compartimos qué pasa con tu cuerpo cuando abandonas el consumo del tabaco.

Las 8 primeras horas

Se manifiestan las primeras mejoras. El cuerpo reconoce la entrada de oxígeno y la presión arterial y la frecuencia cardiaca vuelven a la normalidad. La oxigenación pulmonar mejora debido a la no ingestión de las partículas tóxicas que se inhalan en el humo del tabaco.


A las 24 horas

Los primeros días son los más difíciles debido a que sentirás ganas de fumar suelen ser muy intensas y frecuentes pero disminuyen progresivamente hasta desaparecer. El nivel de monóxido de carbono en sangre baja al nivel normal. Además, comienza a recuperarse el olfato y la comida sabe mejor.


A la semana

En la primera semana sin fumar se normaliza la función respiratoria y el cuerpo elimina completamente la nicotina o sus derivados, como la cotinina. Sin embargo, existen otros componentes en el tabaco que se acumulan en los pulmones y pueden tardar años en desaparecer de nuestro organismo.


A los 6 meses

Se reduce el riesgo de sufrir de resfriados y bronquitis. A parte de causar cáncer de pulmón, fumar causa una sintomatología característica. Después de los primeros 6 meses, el cuerpo se estabiliza y crea defensas para combatir este tipo de enfermedades comunes.


Al año

En el primer año se reduce casi al 50% la probabilidad de sufrir de un infarto y de otras enfermedades letales que atacan el corazón.


A los 5 años

El riesgo de sufrir enfermedades al corazón se iguala al de las personas que no fuman. La mayoría de las funciones respiratorias están totalmente normalizadas. El riesgo de cáncer de boca, garganta, esófago y vejiga se reduce a la mitad.


A los 10 años

El riesgo de morir a causa de una enfermedad causada por el consumo del tabaco es igual a la de una persona que no fuma. Nuestro organismo es capaz de recuperar índices de riesgo similares a los de las personas no fumadoras. 


Estos son solo algunos beneficios que se manifiestan en nuestra salud al dejar de fumar. Recuerda que dar el gran paso es difícil y no está mal pedir asesoramiento médico o psicológico. El esfuerzo te recompensará, pues te sentirás mejor, mejorará tu salud y la de tu familia, dejarás de depender del tabaco y tu economía te lo agradecerá.


Fuente: Sanitas
Una gran motivación es saber que desde el momento en el que tomas la decisión de abandonar el consumo del tabaco, tu salud empieza a mejorar 
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